Ahora un nuevo ataque (esta vez de la variante Petya) se ha extendido por varios países (entre ellos España), afectando a empresas tan importantes como Maersk , gigante danés del sector transporte ,la farmacéutica estadounidense Merck o la compañía de alimentación Mondelez.
Cuando un ransomware infecta el dispositivo de un usuario, cifra todos sus archivos, bloqueándolos de una manera efectiva y dejándolos inaccesibles a la víctima. Se pide un rescate en forma de moneda virtual a cambio de restaurar el acceso a los archivos.
El precio para desbloquear los datos y el hardware aumenta con el tiempo. Si el pago no se realiza antes de la fecha límite, el dispositivo se vuelve permanentemente inaccesible.